Los últimos semestres de clases virtuales e híbridas nos han dejado múltiples aprendizajes, tanto a los docentes como a quienes trabajamos apoyándolos para hacer sus cursos más divertidos, innovadores y eficientes. Es el caso de Ana González, especialista digital de Cengage, quien en esta entrevista relata su experiencia ayudando a los docentes a mejorar el uso de las plataformas digitales para impartir sus cursos.
¿Cómo has vivido el regreso a clases desde tu puesto?
Incluso desde antes de la pandemia, el regreso a clases siempre ha implicado mucho trabajo, tanto para las empresas que están brindando tecnología educativa como para los colegios y los padres de familia. Desde mi posición, he comprobado que podemos ofrecer un mejor servicio adaptándonos a cada una de las instituciones con las que trabajamos, estando muy atentos a sus necesidades particulares y a la tecnología educativa que tengan contratada.
¿Crees que el uso de tecnología permanezca aun cuando volvamos al aula 100%?
Definitivamente, uno de los aprendizajes que tuvimos durante la pandemia es que la tecnología llegó para quedarse. La tecnología es una herramienta que ayuda e insta a los alumnos a tener un mejor aprendizaje y retroalimentación de manera casi inmediata.
Entonces, el docente reduce un poco la cantidad de trabajo que tiene en cuanto a la elaboración de materiales y el alumno se va sintiendo cada vez más acompañado con estas herramientas y plataformas digitales. La adecuación que vaya haciendo cada institución y cada docente de acuerdo con su planeación y objetivos de aprendizaje va a marcar la diferencia dentro de esta implementación de la tecnología, pero definitivamente se seguirá utilizando.
¿Qué aprendizaje te llevas de estos semestres de visitar colegios de forma remota?
El aprendizaje principal es ser empáticos. Cada institución tiene una organización diferente, requerimientos diferentes y también cada persona está viviendo una situación diferente. Yo he aprendido que primero hemos de saber escuchar la necesidad que está teniendo el docente y sus alumnos, así como los coordinadores, y a partir de esta necesidad identificada brindar una atención o una guía adecuada.
¿Qué consejo le darías a los docentes que están empezando a adoptar tecnología para sus cursos?
Hay una locución latina que me gusta mucho, ‘sapere aude’, significa “atrévete a saber”. Mi consejo es que no tengan miedo: atrévanse a seguir implementando tecnologías e innovación, para que sus clases sean más entretenidas y llamen la atención de sus alumnos. Cuando se capta la atención de los alumnos, se les puede conducir hacia aprendizaje significativos y lograr los objetivos de aprendizaje del curso.
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