Hay muchas formas de aprender además de estudiar un libro o memorizar un contenido online. Cuando he intentado explicar esto, me gusta acercarme a la experiencia personal a través de 3 preguntas sencillas:
1. ¿Cómo aprendes?
Es bueno ser consciente que el aprendizaje continúa toda la vida. Que ya no recibamos clases o estudiemos no significa que acabó nuestro rol como aprendices. Es más, da igual tu edad, todavía te queda mucho por aprender y aplicar.
2. ¿Dónde aprendes?
Es decir, cuáles son tus entornos de aprendizaje: tu puesto de trabajo con tu ordenador conectado, la sala de reuniones, la máquina del café, el aula donde recibes formación, la plataforma virtual, tus conversaciones con la familia y amigos, los viajes que haces, los libros que lees.
3. ¿Cómo te gusta aprender?
¿Eres un ratón de biblioteca o prefieres la interacción con otros?
¿Tienes diferentes preferencias en función del contenido o el contexto?
Detenerse en estas 3 preguntas nos lleva a concluir que se aprende de muy diferentes maneras. A mi me gusta resumirlas en estas 9 estrategias:
- Aprender estudiando: el modelo tradicional, enfrentándote a los contenidos con o sin ayuda de un formador o tutor.
- Aprender de expertos: que aportan su experiencia y conocimiento, responden tus dudas, evalúan tu trabajo.
- Aprender haciendo: a través de actividades, prácticas, ejercicios, juegos
- Aprender colaborando: haciendo con otros.
- Aprender descubriendo: investigando, reflexionando, buscando, eligiendo
- Aprender aportando: generando contenido o recursos, participando en debates, comentando el trabajo de otros.
- Aprender valorando: siendo capaz de valorar y evaluar el trabajo de otros, de tus pares.
- Aprender enseñando: dicen que es como más se aprende.
- Aprender aplicando: aplicando en el contexto real algo que te han enseñado o has aprendido por ti mismo
Los modelos eLearning actuales, las nuevas metodologías y plataformas, permiten aplicar todas estas estrategias:
- Van mucho más allá del contenido online de estudio y las preguntas al tutor.
- Provocan la actividad, facilitan la interacción y la creación de conocimiento.
- Incluyen el juego como disparador del aprendizaje.
- Facilitan el trabajo colaborativo, ayudan a compartir el conocimiento.
- Incluyen la evaluación entre pares.